Derivados – ¿Qué son?
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Índice
PUNTOS CLAVE
¿QUÉ SON LOS DERIVADOS?
TIPOS DE DERIVADOS
VENTAJAS Y DESVENTAJAS DE LOS DERIVADOS
CÓMO INVERTIR EN DERIVADOS
CONCLUSIÓN
PREGUNTAS FRECUENTES
Los traders se han sentido cada vez más atraídos por el concepto de los derivados financieros últimamente. Estos instrumentos financieros se consideran herramientas más complejas en comparación con las que normalmente utilizan los traders principiantes.
Los contratos de derivado financiero son acuerdos especiales entre dos o más partes que derivan su valor del activo subyacente, como acciones, bonos de renta fija, materias primas o divisas del mercado de cambios.
En esta guía, exploraremos en detalle el concepto de cada uno de los derivados como instrumentos de inversión, sus tipos, características importantes, así como sus ventajas y posibles riesgos.
Puntos Clave
- Los instrumentos derivados son contratos entre dos o más partes cuyo valor se basa en activos subyacentes.
- Los cuatro tipos principales de instrumentos derivados incluyen contratos de futuros, forward, opciones y swaps.
- Cada derivado se utiliza principalmente para gestionar el riesgo, apostar por cambios de precios, capitalizar oportunidades de arbitraje y apalancar posiciones.
- Un contrato de derivado financiero puede negociarse en mercados extrabursátiles (OTC) para beneficiarse de la personalización y flexibilidad, o en bolsas reguladas para reducir el riesgo y garantizar la estandarización.
¿Qué son los Derivados?
Los instrumentos financieros derivados son contratos cuyo valor se basa en un activo subyacente, como acciones, bonos de renta fija o materias primas, y que se utilizan para especulación, cobertura y otros objetivos financieros. Estos instrumentos pueden negociarse en mercados extrabursátiles (OTC) o en bolsas reguladas como el Chicago Mercantile Exchange (CME).
Las características clave de cada derivado incluyen, entre otras:
- Acuerdos estandarizados: los instrumentos derivados consisten en condiciones predeterminadas, como el tamaño del contrato, la fecha de vencimiento y el activo involucrado. Esto simplifica el proceso de negociación en los mercados financieros.
- Uso potencial de apalancamiento: puedes apalancar tu posición en un derivado financiero. Esto significa que obtienes la capacidad de gestionar cantidades significativas de activos con una inversión relativamente modesta, lo que potencialmente puede resultar en mayores ganancias (o pérdidas).
- Capacidad de cobertura: un derivado ayuda a los inversores a protegerse contra caídas imprevistas en los precios de los activos en su cartera.
- Posibilidades especulativas: las transacciones con derivados permiten a los traders especular sobre cambios de precios sin poseer el activo subyacente.
- Varias formas: los contratos de futuros, opciones, forwards y swaps responden a distintos requisitos de inversión, ofreciendo una variedad de opciones y flexibilidad en las estrategias.
- Liquidez: este tipo de derivado se caracteriza por una alta liquidez debido a su estandarización y negociación en bolsa, lo que hace más conveniente comprar o vender estos productos.
Tipos de Derivados
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Diferentes tipos de productos derivados se utilizan en el mercado para gestionar riesgos o para especulación. Tener una comprensión clara de estas categorías es crucial para gestionar una posición de manera eficiente.
Cada producto derivado ofrece características distintas y se adapta a estrategias financieras particulares. En las siguientes secciones, examinaremos los tipos principales de contratos derivados, delineando sus características clave y casos de uso.
Futuros
Al referirse a contratos de futuros, los inversores deben tener en cuenta que el activo subyacente representado por este instrumento está sujeto a un acuerdo predefinido para comprar o vender a un precio establecido en una fecha específica en el futuro.
Estos instrumentos derivados, negociados en bolsa, son populares para apostar por fluctuaciones futuras de activos como materias primas, divisas y otros instrumentos financieros. Sin embargo, antes de añadir contratos de futuros a una cartera, cada inversor necesita conocer qué implican. Aquí están los detalles clave que debes conocer:
- Estandarización: los contratos de futuros están altamente estandarizados. El mercado donde se negocian determina los términos del contrato, como la cantidad, calidad y fecha de entrega del activo. Esto garantiza una buena liquidez y facilita la negociación.
- Obligaciones para compradores y vendedores: tanto el comprador como el vendedor deben cumplir con las condiciones del contrato al vencimiento. Esto significa que el comprador debe adquirir, y el vendedor entregar, el activo subyacente al precio previamente acordado.
- Liquidación diaria: el valor de los futuros se actualiza diariamente según los precios del mercado, y las ganancias o pérdidas se determinan al final de cada jornada de negociación. Este procedimiento garantiza que el valor del contrato refleje el precio de mercado y que cualquier ganancia o pérdida se registre de inmediato.
Los contratos de futuros se emplean habitualmente tanto para cobertura como para especulación, como otros instrumentos derivados, pero su estandarización y elevada liquidez los hacen especialmente atractivos para inversores institucionales y traders.
Forwards
Este tipo de derivado representa un acuerdo personalizado entre dos partes para negociar un activo a un precio acordado en el futuro. A diferencia de los futuros, los forwards se negocian en mercados OTC y no están estandarizados. Las condiciones del acuerdo, como cantidad, calidad y cronograma de entrega, se ajustan específicamente a las necesidades de las partes involucradas.
Las principales características de los contratos forward son:
- Personalización: los contratos forward ofrecen amplias posibilidades de personalización, permitiendo a las partes definir condiciones específicas sobre el activo subyacente, el tamaño del contrato y la fecha de vencimiento.
- Riesgo de contraparte: al negociarse en mercados OTC, estos contratos presentan mayor riesgo de incumplimiento por parte de uno de los participantes.
- Sin liquidación diaria: a diferencia de los futuros, los forwards no se liquidan diariamente ni se marcan a mercado. En su lugar, se liquidan al vencimiento, momento en el que se reconocen todas las ganancias o pérdidas.
- Flexibilidad: al no estar estandarizados, los forwards permiten adaptar el contrato a requisitos específicos de cobertura o inversión.
Las empresas e instituciones financieras utilizan habitualmente los forwards para cubrir riesgos específicos mediante condiciones a medida.
Opciones
Las opciones son instrumentos derivados que proporcionan al titular el derecho, mas no la obligación, de comprar o vender un activo a un precio predeterminado antes de una fecha específica en el futuro. A diferencia de los futuros, las opciones no implican obligación: permiten a sus tenedores decidir no ejercer el acuerdo si no les resulta ventajoso.
Veamos más de cerca las características clave de las opciones:
- No vinculante: como se mencionó anteriormente, a diferencia de los futuros, el titular de una opción tiene el derecho de no ejecutar el contrato.
- Pago de prima: al adquirir una opción, el comprador paga una prima al vendedor, que representa el costo de la opción.
- Personalización: las opciones pueden adaptarse en cuanto al precio de ejercicio, la fecha de vencimiento y el activo subyacente, aunque las opciones estandarizadas se negocian frecuentemente en mercados organizados.
- Riesgo limitado: la pérdida máxima del comprador está limitada a la prima pagada, en contraste con otros derivados que pueden implicar pérdidas sustanciales.
Aunque las opciones, al igual que los forwards, son bastante flexibles, generalmente ofrecen un menor nivel de personalización, ya que los forwards se negocian en mercados OTC y pueden adaptarse a necesidades específicas. Por lo tanto, el riesgo de contraparte también suele ser menor en las opciones, ya que las cámaras de compensación en mercados organizados ayudan a mitigar este tipo de riesgo.
Swaps
Los swaps son contratos derivados que representan acuerdos entre dos partes para intercambiar flujos de efectivo u otros instrumentos financieros durante un período determinado. Un swap de tipos de interés es una modalidad común en la que las partes intercambian pagos basados en tipos de interés fijos y variables.
Las características clave de los swaps incluyen:
- Intercambio de flujos de efectivo: las partes intercambian pagos que pueden basarse en tipos de interés, divisas u otras métricas financieras.
- Personalización: los swaps ofrecen mayor flexibilidad que los futuros estandarizados o las opciones negociadas en bolsa, lo que permite personalizarlos según necesidades financieras específicas.
- Riesgo de contraparte: al negociarse típicamente en mercados OTC, los swaps conllevan un riesgo de incumplimiento significativo.
- Contrato de largo plazo: los swaps suelen tener plazos más extensos, lo que los hace adecuados para gestionar riesgos financieros a largo plazo.
Liquidaciones en Efectivo de Futuros
Las liquidaciones en efectivo de futuros son una forma particular de contrato derivado financiero. Implican que las partes resuelven el contrato intercambiando dinero en lugar del activo físico. Este instrumento es especialmente atractivo para los inversores que desean especular sin involucrarse en la entrega física del activo.
En este tipo de liquidación no hay necesidad de realizar la entrega física. El ajuste financiero se efectúa con base en el precio del activo al vencimiento del contrato.
Este mecanismo permite a los inversores beneficiarse de las fluctuaciones del mercado sin supervisar el activo subyacente. Al entrar en un contrato con fines de compensación, pueden cerrarlo eficientemente, centrándose únicamente en los cambios de precios para obtener beneficios.
Ventajas y Desventajas de los Derivados
Los instrumentos derivados financieros son herramientas eficaces que ofrecen diversas ventajas, aunque también implican riesgos considerables. Los inversores deben tener una comprensión clara de ambos aspectos para utilizarlos de forma efectiva, mejorar sus carteras y gestionar riesgos.
Ventajas de cada derivado |
Desventajas de cada derivado |
Instrumento de cobertura |
Cambios en el tiempo antes del vencimiento |
Uso de apalancamiento |
Riesgo de apalancamiento |
Mayor liquidez |
Riesgo de contraparte |
Fijar precio |
Costo de mantener el activo subyacente |
Flexibilidad |
Tipos de interés |
Ventajas de los derivados
- Mitigación de riesgos: los derivados ayudan a cubrir riesgos de mercado, protegiendo la cartera frente a caídas inesperadas en los precios.
- Uso de apalancamiento: el apalancamiento permite controlar posiciones grandes con poco capital, aumentando potencialmente los rendimientos. Sin embargo, requiere conocimiento profundo.
- Mayor liquidez: muchos derivados, en especial los negociados en bolsa, ofrecen alta liquidez, lo que permite abrir y cerrar posiciones con facilidad.
- Fijación de precios: permiten fijar el precio de un activo subyacente, proporcionando certeza y estabilidad en la planificación financiera.
- Flexibilidad: los productos de derivado pueden adaptarse a objetivos financieros y niveles de tolerancia al riesgo individuales.
Desventajas de los derivados
- Decaimiento temporal: a medida que se acerca la fecha de vencimiento, el valor temporal del derivado disminuye, afectando especialmente a las opciones.
- Riesgos del apalancamiento: el apalancamiento puede amplificar las pérdidas. Requiere experiencia para gestionar adecuadamente los riesgo
- Riesgo de contraparte: en mercados OTC, existe la posibilidad de que una de las partes incumpla el contrato.
- Costos de mantenimiento: cuando el derivado implica entrega física, pueden generarse costos por almacenamiento, seguro y otros factores, lo cual reduce la rentabilidad.
- Sensibilidad a los tipos de interés: las variaciones en las tasas pueden afectar el valor del derivado, especialmente cuando se utilizan fondos prestados.
Cómo Invertir en Derivados
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Invertir en instrumentos derivados financieros puede servir como un método inteligente para diversificar tus inversiones y manejar riesgos potenciales. Aquí hay algunos puntos cruciales a tener en cuenta:
- Asegúrate de comprender lo básico: entender conceptos financieros fundamentales es esencial antes de invertir en instrumentos derivados. Este conocimiento te ayudará a comprender cómo funcionan los derivados OTC y los negociados en bolsa, y a tomar decisiones informadas.
- Especulación: una forma de acceder a este tipo de instrumento es utilizarlo con fines especulativos. Esto significa apostar por los movimientos futuros de precios sin poseer realmente el activo subyacente.
- Cobertura: cada derivado puede utilizarse de manera eficaz para que los inversores protejan sus carteras mediante estrategias de cobertura. Un ejemplo clásico es comprar una opción de venta para proteger una acción contra una caída en su valor.
- Fondos Cotizados en Bolsa (ETFs): los ETF que incorporan derivados son adecuados para inversores pasivos que buscan una exposición diversificada a distintos mercados, reduciendo su riesgo individual y adoptando un enfoque de baja intervención.
- Cuenta de corretaje. para invertir en instrumentos derivados, es necesario abrir una cuenta de corretaje que brinde acceso a estos mercados. Elige un corredor confiable, por ejemplo, J2T: que ofrezca herramientas esenciales y recursos educativos para ayudarte a operar de manera eficiente.
Para que tu operativa con derivados sea aún más fluida, aquí tienes algunos consejos clave al iniciar tu trayectoria con estos instrumentos:
- Comienza con una pequeña inversión para obtener experiencia práctica y familiarizarte con cada tipo de derivado.
- Mantente informado sobre las tendencias del mercado y continúa aprendiendo sobre productos derivados.
- Considera buscar orientación de asesores financieros especializados en este tipo de instrumentos.
Conclusión
La negociación de instrumentos derivados se distingue por su flexibilidad y complejidad, permitiendo ampliar posiciones con un capital limitado. A diferencia de las inversiones tradicionales, los derivados son contratos cuyo valor depende de activos subyacentes, negociados en mercados OTC o en bolsas reguladas.
Ofrecen control del riesgo y alto potencial de ganancias, pero también implican riesgos como la volatilidad del mercado, los cambios en los tipos de interés y el riesgo de contraparte.
Evaluar cuidadosamente las ventajas y desventajas permite a los inversores decidir si los derivados se alinean con sus objetivos financieros y su tolerancia al riesgo.
Preguntas Frecuentes
¿Cuáles son algunos ejemplos de derivados?
Los contratos derivados incluyen futuros, opciones, swaps y contratos forward. Cada uno tiene características específicas que responden a distintas necesidades. Los futuros son contratos estandarizados para comprar o vender un activo a un precio determinado en una fecha futura. Las opciones otorgan el derecho, pero no la obligación, de comprar o vender un activo subyacente a un precio previamente establecido. Los swaps permiten intercambiar flujos de efectivo entre partes. Los forwards son acuerdos personalizados entre dos partes para negociar un activo en el futuro.
¿Cuáles son los principales beneficios y riesgos de los derivados?
Una transacción derivada ofrece ventajas como cobertura, liquidez, personalización y apalancamiento. Las desventajas incluyen riesgos de mercado, contraparte, complejidad y pérdidas si no se gestionan adecuadamente.
Los derivados permiten proteger carteras ante movimientos adversos y amplificar posiciones con menos capital. Sin embargo, el apalancamiento también puede aumentar las pérdidas, y su complejidad requiere conocimientos específicos para un uso eficaz.
¿Qué son los derivados negociados en bolsa?
Son contratos estandarizados que se negocian en bolsas reguladas. Permiten a los traders comprar o vender activos a precios preestablecidos.
A diferencia de los instrumentos OTC, que se negocian en mercados menos transparentes, los derivados en bolsa ofrecen mayor transparencia, liquidez y menor riesgo de contraparte, gracias a la intervención de cámaras de compensación.
¿Cómo se utilizan los derivados?
Los derivados se utilizan para cubrir riesgos mediante fijación de precios, obtener mayores retornos especulando sobre movimientos futuros, aprovechar oportunidades de arbitraje por diferencias de precios entre mercados. Tanto inversores como instituciones financieras emplean estos instrumentos para gestionar riesgo, especular o mejorar la eficiencia operativa en los mercados.